Coordinación Nacional de Comunicación Social
México D.F., 
 
 



VERSIÓN ESTENOGRÁFICA DE LA CONFERENCIA DE PRENSA PARA DAR A CONOCER LOS AVANCES DEL SEMINARIO AVANCE TECNOLÓGICO Y E-DEMOCRACIA EN MÉXICO, A CELEBRARSE EN EL INSTITUTO FEDERAL ELECTORAL EL PRÓXIMO 21 DE NOVIEMBRE, LLEVADA A CABO EN LA SALA DE PRENSA DE DICHO INSTITUTO.


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-Moderador: Muy buenos días. Gracias por su asistencia.

Quiero darle la bienvenida al profesor Miguel Ángel Solís y al licenciado Antonio Cervantes, que nos van a hablar sobre la conferencia que en breve el IFE será anfitrión.

Cedo la palabra al licenciado Antonio Cervantes, por favor.

-Lic. Antonio Cervantes: Gracias, buenas tardes.

Venimos hoy a conversar con ustedes sobre un tema que se refiere a la convergencia de la tecnología y la democracia.

Estamos preparando un Seminario para el próximo 21, miércoles 21 de noviembre, cuyo título es Avance Tecnológico y e-democracia en México.

Este concepto de la e-democracia se refiere al uso de nuevas tecnologías en los procesos democráticos, y es algo que está ocurriendo en todo el mundo, bueno, en los regímenes democráticos y está ocurriendo a una velocidad muy grande.

Y las posibilidades que se están abriendo allí y los cambios que se están viendo son también muchos, muy variados y creemos que en el caso de México también ya se han visto algunos ejemplos de esto y hay creo que muchas más preguntas que respuestas en el aire.

Entonces, la idea de llamar a reflexionar sobre este tema es lo que nos motivó a, institucionalmente, junto con la Cámara de Diputados Federal, a organizar este Seminario y reflexionar sobre estos temas.

En el año 2004, en la India, que es el régimen democrático más grande del mundo, casi 380 millones de personas fueron a votar en una elección nacional usando urnas electrónicas, y la votación y el experimento resultó un éxito.

Y como sabemos, la India es un país de tremenda desigualdad y donde hay muchísima población que incluso es analfabeta y no tuvo problemas en utilizar esta máquina, esta forma de votación electrónica. Ese es, digamos, un ejemplo bueno.

Hay otros casos, como en Estados Unidos, en la última elección del Presidente, el actual presidente Bush, existieron muchos reportes, información acerca de que hubo operación de movilización de votantes vía estos instrumentos que se denominan PDA’s desde donde la gente o los operadores regionalmente movilizaban, invitaban a la gente a votar, obviamente por determinada preferencia política.

Aquí es un terreno quizás más controversial, ese tipo de fenómenos es bueno, es deseable o es malo e indeseable, no sabemos. Pero el punto es que estos ejemplos, como otros muchos que están sucediendo y posibilidades que puedan en el futuro, y no estoy hablando de 10 ni 15, ni 20 años, sino en tres o en seis años ya, o ya se han visto o se están viendo a nivel local en México, estas cuestiones llaman o abren la necesidad de reflexionar sobre ellas, de plantear hipótesis, de traer datos; en fin, de iniciar un debate y qué mejor que sea con la presencia de legisladores, de especialistas y, sobre todo, el público, la sociedad abierta para que esté enterado y esté participando de estos temas.

Es un tema de futuro, no es un tema que consideremos coyuntural y lo organizamos en tres subtemas, digamos así, la presentación de este Seminario. El primero de ellos es Sociedad y Campañas Políticas ante Medios Alternativos de Comunicación.

Por un lado, aquí, entonces, es reflexionar sobre cómo la sociedad, los ciudadanos se han apropiado para acercarse de estas tecnologías de comunicación y de información, para acercarse a la política, cómo se han apropiado de ellas para acercarse a la política, para informarse, reflexionar, opinar, incluso como instrumento de movilización.

Son fenómenos ya inmediatos que se están dando en todo el mundo, vemos cosas ya hasta chuscas, como este incidente reciente entre el Rey de España y el Presidente de Venezuela, y ya está ahí un tono de teléfono con el reclamo que hace el Rey al Presidente de Venezuela. Es así de rápido que estas cosas están, la sociedad está apropiándose de esto y lo hace suyo vía la tecnología.

Por otro lado, están los partidos políticos que dan uso a estos recursos cada vez más como parte de estrategias políticas y de promoción política de campaña y que estamos viéndolo en todo el mundo.

Quizá un caso reciente y muy sonado fue el debate sostenido entre precandidatos demócratas a la presidencia de Estados Unidos en este portal o mecanismo tecnológico que se llama Youtube, que se ha convertido en todo un fenómeno en el mundo.

El segundo tema o la segunda mesa se refiere a la democracia y las urnas electrónicas como una agenda pendiente. Y aquí en unos momentos el profesor Miguel Ángel Solís se referirá a ese tema de un cambio tecnológico específico que se refiere a una posibilidad de votación donde ya involucra a estas cuestiones de tecnología. Y ahí hay muchas preguntas, hay riesgos, hay beneficios, hay posibilidades, necesidades de regulación, en fin.

Y el tercer y último tema se refiere a los partidos políticos en la democracia, y aquí las oportunidades, pero también los retos que presentan las comunidades virtuales, el Internet, la red, las comunicaciones, pues de ahí surgen posibilidades para los partidos, pero también exigencias nuevas y de mayor velocidad en temas como la transparencia o una participación ciudadana mucho más activa y mucho más cercana también.

México es un país que tiene alrededor de 23 millones de personas que están utilizando continuamente Internet y es un número que crece a tasas grandes cada año. Hay alrededor de 60 millones de usuarios de teléfonos celulares en una población de más o menos 100 millones.

Entonces son temas, creo, que es importante reflexionar en estos momentos e ir explorando las posibilidades de la evolución de éstos a futuro.

Para la autoridad electoral, en este caso, pues es clave empezar a esbozar algunos planteamientos y ver que son las voces especialistas, ciudadanas y de legisladores que deciden estos temas, porque eventualmente impactan en la competencia y en la promoción político-electoral.

-Moderador: Tiene la palabra el profesor Miguel Ángel Solís.

-Mtro. Miguel Ángel Solís: Buenos días también a todos. Qué trato estar con ustedes en el preámbulo del seminario de la semana entrante.

Quiero comentarles que el Instituto Federal Electoral ha trabajado un proyecto de votación electrónica en los últimos años, un proyecto que implica no sólo el diseño de un equipo o de un aparato o de un instrumento de votación electrónica, sino todo el entorno de orden jurídico, de orden logístico, de orden propiamente electoral que significa.

¿Qué quiero decir? Bueno, incluso cultural, poder tener sistematizado el conocimiento claro de lo que requeriría una reforma legal al respecto, lo que se requeriría en términos logísticos en la casilla para poder hacer un equipo de votación, poder utilizar un equipo de votación electrónica y todos los aspectos del entorno de una urna electrónica propiamente.

Sin embargo, queremos decirles que el diseño del IFE aspira a diferenciarse de las otras urnas electrónicas que comúnmente conocemos, no sólo en nuestro país, sino a nivel mundial.

Sabemos por ejemplo que en México, el Instituto Electoral de Coahuila ha venido trabajando durante varios años una urna electrónica; lo ha hecho también el Distrito Federal y tienen ya una cierta cantidad de equipos que han empezado a poner a prueba.

El Instituto Federal Electoral está haciendo lo propio y ha llegado a tal momento de desarrollo el prototipo de nuestro aparato de votación, que puede ya ser mostrado.

Y quiero comentarles que significativamente en esta entrevista es la primera vez que se da a conocer a público abierto, es la primera vez que se comenta a los medios este proyecto.

No es un proyecto coyuntural, ciertamente como lo ha mencionado el licenciado Cervantes; no surge de la problemática de las elecciones últimas del IFE o de la de 2006, se ha venido trabajando de tres, cuatro años atrás.

Pero se da el caso de que al término de este año tendremos ya no un prototipo de equipo para votar electrónicamente, tendremos 20 equipos o 30 equipos, con los cuales ya el año entrante podemos iniciar pruebas piloto a nivel de organizaciones, a nivel de grupos focalizados de la ciudadanía, organizaciones políticas, desde luego nos interesan fundamentalmente los partidos políticos.

El asunto de la votación electrónica es un asunto donde tiene mucho que ver la certeza que se ofrezca a través del equipo de votación y es un asunto eminentemente de confianza política también.

Existen, como bien saben ustedes, opiniones encontradas al respecto. Hay quienes consideran que la votación electrónica resuelve muchos problemas de las elecciones en los países, pero también despierta nuevas problemáticas. Yo me refiero a los hackers que se dice que pueden introducirse en los sistemas para modificar las cifras, me refiero a los altos costos, me refiero a lo que algunos especialistas hace un mes en Querétaro al reunirse concluyeron que México estaba todavía muy poco preparado como para votar en forma electrónica.

Y yo les digo que el proyecto que está trabajando el IFE contempla todas estas circunstancias, tratando de prevenirlas y de remediarlas. Es decir, nuestro proyecto del IFE que ustedes podrán conocer el día 21 es un proyecto que ya se fija en que no debe ser un proyecto de alto costo.

Es decir, mientras que las urnas electrónicas que conocemos cuestan, no sé, mil 200 dólares, 12 mil, 13 mil, 15 mil pesos. Nuestro proyecto es de un aparato que cueste 300, 400 dólares, es decir cuatro mil pesos solamente, porque nosotros contrariamente a lo que diseñan institutos electorales estatales y que piensan en dos millones de ciudadanos, no sé, nosotros tenemos que pensar en 60 y tantos millones de ciudadanos ahorita y, quizá para cuando se pueda llevar a la práctica la votación electrónica, tendremos que pensar en 70 millones de electores en México, en 140 mil casillas, no en tres mil casillas como un Instituto Estatal Electoral.

Necesariamente, entonces, tendremos que diseñar un equipo barato, más barato al menos o relativamente barato. También hemos pensado que debe ser un aparato que no traslade la votación desde la casilla, exactamente para evitar la intromisión de jackers, que sea un aparato que cierre su funcionamiento en sí mismo y que pueda ser entregado a los Consejos Distritales para que se acumulen los resultados de ese aparato con los  de todos los demás aparatos uno por casilla electoral en el país.

Y, hemos pensado en un equipo que también contemple todo lo que se ha dicho en contra de que un país con una población de un cierto nivel educativo bajo, con un uso que no es práctica cotidiana de la computadora pueda acceder a la votación electrónica.

Hemos pensando entonces en un diseño muy simple, muy sencillo, desprovisto de pantallas y de equipos que reaccionen al tacto, desprovistos de todo tipo de espectacularidad; no hay mensajes grabados, no hay luminosidades ni presentación de plataformas ni nada, sino un equipo sencillo en donde el ciudadano ingrese, en su caso, al cancel electoral, oprima el emblema de un partido, oprima el emblema de otro partido, oprima el emblema de las tres elecciones y se salga del cancel porque ya votó en un acto eminentemente sencillo y como si estuviera simplemente ante tres boletas electorales, en el caso de las elecciones presidenciales.

O que sea todavía más sencillo en el caso de las elecciones que solamente implican las diputaciones, que ingrese al cancel electoral oprima el emblema de su preferencia y salga del cancel porque ya votó. Es decir, es un equipo sumamente sencillo que piense en el tránsito de la elección de papel a la elección con medios electrónicos.

Por eso el diseño del IFE que ustedes conocerán el día 21 se parece más a una sumadora que a una computadora, eso hace posible el tránsito cultural, eso hace posible el bajo costo y, yo quisiera solamente agregar que con el Centro para el Desarrollo Democrático hemos previsto, para el 2008, poder hacer estas pruebas piloto a que me referí hace un momento, con diversos públicos, focalizando particularmente a quienes permanentemente se interesan en las elecciones en México, como son los propios medios de comunicación, como son los partidos políticos, fundamentalmente, los estudiosos del fenómeno electoral.

Con esto yo creo que estaríamos más bien a la espera de algunos comentarios o preguntas de su parte.

-Moderador: César Reyes, de Diario Monitor, por favor.

-Pregunta: Gracias, buenas tardes.

Mi duda es la siguiente, en un escenario donde se, insisto, se plantea, por lo menos lo que se está discutiendo ahorita en la Cámara de Diputados y Senadores, de incluir el voto por voto para la siguiente elección.

¿Cómo funcionaría este esquema? ¿No abriría otro frente de conflicto en un escenario donde se cerrara tanto la votación que se tuviera que recurrir a esta figura de voto por voto?

Gracias.

-Mtro. Miguel A. Solís: Bueno, mira, muy interesante pregunta porque, repito, no es producto de la coyuntura política actual, es un trabajo que se viene desarrollando de tres, cuatro años atrás.

Sin embargo, casualmente la votación por este medio, particularmente quiero referirme al aparato que nosotros estamos trabajando, resolvería ese tipo de problemas porque primero las actas no las elaborarían los funcionarios de las casillas, la emitiría el equipo de votación; de tal manera que no intervendría el factor humano y no habría la posibilidad, por ejemplo, de errores humanos en las actas. Al contrario, la votación por este medio nos proporciona algunas certezas fundamentales.

En todas las elecciones, ustedes saben, existe entre un dos y un tres por ciento de votos nulos. Algunos de ellos son votos que los propios ciudadanos anulan intencionadamente, deciden, por ejemplo, que no les satisface ninguna opción y anulan su boleta, la cruzan completa o cruzan más de un emblema y saben que su voto se va a anular.

Pero también hay una gran cantidad de votos nulos por error del ciudadano; por error, porque se pasa la marca que ponen sobre el emblema y toca otros emblemas y hay siempre un dos, un tres por ciento.

Si ustedes revisan las estadísticas de la elección de 2006, por ejemplo, en la elección presidencial hubo más del dos por ciento de votos nulos. Y esto quiero decirles que llega a cerca del millón de votos.

En una elección donde votaron 42 millones de ciudadanos, un millón resultó anulado en su derecho a votar por algún error. Nuestra máquina ya no permite los errores.

Sí da la posibilidad de que un ciudadano anule intencionalmente su voto, pero ya no habría errores en la votación, porque la máquina no lo permite.

Oprimir un emblema, oprimir el otro emblema y el otro emblema y terminó de votar el ciudadano, así de sencillo. Y ya no puede anularse su voto, la máquina no recibe votos anulados por error.

Y aquí les voy a decir algo significativo: precisamente porque tiene esta sencillez y porque busca el tránsito cultural del papel a lo electrónico, nuestra urna electrónica tiene un nombre propio, distinto a todo lo que hemos conocido, se llama boleta electrónica.

Porque lo que el ciudadano tendría ante sí sería lo mismo exactamente que una boleta de papel, es decir, la máquina tiene enfrente tres boletas puestas, digamos, si no hubiera el cuerpo mismo de la máquina estarían el ciudadano frente a tres boletas sobre la mesa. Y en lugar de marcar con un crayón oprimiría el emblema de su preferencia en las tres boletas, se saldría y es todo.

La máquina se encarga de que no haya errores, la máquina se encarga de emitir un acta exacta con los votos emitidos, el equipo sería auditable en todos sus momentos, pero además produce una boletita de papel que va apareciendo cada vez que se oprime un emblema, va apareciendo la boletita de papel en una pantalla, en una mica, atrás de una mica para que el ciudadano constante que lo que oprimió es lo que está imprimiéndose.

Y luego que oprime las tres boletas se corta y cae por dentro a la base de la máquina, que es absolutamente transparente y ahí se ve que se van acumulando. Esos no se contarían en la casilla, se contarían solamente si hubiera alguna impugnación, para constatar que el acta que emite la máquina es exactamente el mismo número de votos que están en papel en la urna transparente bajo la máquina.

-Moderador: Iván Flores, por favor.

-Pregunta: ¿Qué presupuesto van a destinar al desarrollo de esta urna electrónica o qué presupuesto tienen destinado ya?

-Mtro. Miguel A. Solís: Mire usted, nuestro presupuesto es muy bajo. El Instituto lo que ha querido es mantener una sonda hacia el futuro.

Tenemos la obligación como institución electoral de estar acompasados al avance de las tecnologías aplicadas a las elecciones, lo han hecho muchos países y, como aquí se dijo, lo ha hecho la India, por ejemplo, que es el mejor ejemplo; y lo ha hecho Brasil, por ejemplo, que es similar a México también en muchos sentidos.

Pero hemos querido mantener con bajo presupuesto vigente a un proyecto que hoy ya tiene la madurez para mostrárselos el día 21, tiene alrededor de un millón de pesos. Ese es el presupuesto total, con eso vamos a tener nosotros 20 ó 30 equipos al terminar este año y esperamos duplicarlo el año que entra, pero ya con un diseño que se vaya modificando y ajustando en razón de las pruebas piloto mismas.

-Moderador: Juan Carlos Villarreal, de Notimex.

-Pregunta: Gracias. Buenas tardes.

Yo quisiera preguntarles dos cosas.

Una. ¿Cómo hacer los amarres políticos para que los partidos acepten esta modalidad a habida cuenta de lo que ocurrió en el 2006, cuando hubo fuertes acusaciones de que había un algoritmo, etcétera, todo eso que ya se conoce?

¿Cómo convencer a los partidos para que los partidos acepten que esta sea la modalidad?

Y, por otro lado, la verdad me parece difícil convencer también a los ciudadanos, es decir, ese tránsito cultural del que usted habla se ve muy apretado el tiempo. ¿Qué harían para convencerlos?

-Mtro. Miguel Ángel Solís: Cómo no, con mucho gusto.

Miren, precisamente empiezo con este concepto último: el tiempo.

Estos proyectos, de acuerdo a la experiencia internacional, no son proyectos que se crean, que se diseñan, que se impulsan para aplicarse el año entrante o la elección siguiente, son proyectos que necesariamente requieren madurar, y madurar en dos sentidos:

Tecnológicamente: los ajustes, los diseños, que van dando como producto las diversas pruebas piloto que van a garantizar que los equipos funcionen perfectamente.

Pero también madurar en la confianza y en la certeza de los actores políticos fundamentales; aquí son indudablemente los ciudadanos y los partidos políticos, lo primero es entonces saber que éste no es un proyecto inmediato, es un proyecto de mediano y de largo plazo.

En términos generales, sabemos nosotros que las naciones que han implementado la votación electrónica han tardado alrededor de 15 años en madurar sus proyectos.

Entonces, nosotros estamos iniciando la salida a las pruebas piloto de nuestros equipos que tendremos a fin de este año, con base en un prototipo que se fue mejorando este mismo año con la opinión de los Vocales del Instituto de todo el país, lo ajustamos y lo vamos a poder pilotear.

Pero nosotros no lo estamos pensando para la elección siguiente, tenemos antes que nada el deber y la necesidad también de presentárselo de inmediato a los partidos políticos, que lo conozcan, que vean cómo se puede auditar, que si es su decisión lo puedan aplicar internamente en las decisiones internas de los partidos si ellos quieren hacerlo, que lo tengan disponible los colegios de profesionales para resolver algunas votaciones internas y algunos otros sectores interesados.

Y por este medio y por otros, y también desde luego que ustedes lo conozcan a detalle, porque los medios son fundamentales, ir permeando el conocimiento de la ciudadanía al respecto y desde luego la confianza. Lo primero es que lo conozcan.

Pero es un proyecto así de varios años, no lo estamos pensando de inmediato.

-Pregunta: ¿O sea que estaríamos pensando en que se pudiera aplicar en elecciones dentro de 10 años tal vez?

-Mtro. Miguel Ángel Solís: La verdad es que la decisión de esto la tienen los partidos políticos.

Yo sí les digo algo, los partidos con toda seguridad en esta reforma electoral están tratando de resolver problemas que se vivieron por ejemplo en el 2006 y que causaron polémica.

Hoy sabemos que las actas que se producen en las casillas son actas del conteo de votos que muestran errores de los funcionarios de casilla.

Tenemos una capacitación compleja, tenemos un diseño del acta que manejan los funcionarios de las casillas que es compleja también, así pide la Ley una serie de datos que tienen que requisitarse en las casillas y estamos haciendo esfuerzos por simplificarlo; sin embargo, nuestro límite es la Ley.

Seguiremos haciendo este esfuerzo en elecciones de papel, desde luego, para poder nulificar o reducir al mínimo posible los errores que siempre han existido en las actas de las casillas, lo sabemos ahora. Pero, por ejemplo, la votación de este tipo las resolvería definitivamente.

Sin embargo, son decisiones fundamentalmente de los legisladores y el Instituto es muy respetuoso de los tiempos que los legisladores creen pertinente para la aplicación en su momento y en su caso de una votación electrónica.

Mientras tanto, la obligación de un Instituto profesional es ir viendo el futuro, estar preparados para el momento dentro de cinco años, dentro de 10 años, dentro de 15 años, que los partidos crean que deben transitar a otra forma diversa que arroje ciertas certezas, entonces el Instituto no voltear a ver el comercio internacional, sino decir como Brasil, como la India, hemos venido desarrollando un proyecto propio que garantiza y que cuida algunas cosas importantes para las elecciones con base en la experiencia internacional al respecto.

-Moderador: Jaime Guerrero, de TV Azteca.

-Pregunta: Gracias, muy buenas tardes.

Estaba mi pregunta muy relacionada con la respuesta que usted dio, sin embargo e independientemente de lo que pudieran decir los partidos, ¿el IFE estaría en condiciones ya de hacer una muestra mucho más seria de lo que ustedes esperan hacer el próximo año para las elecciones federales que vienen o, en su caso, para las elecciones presidenciales del 12?

-Mtro. Miguel Ángel Solís: Bueno, entiendo que es paralela la pregunta a lo electrónico, es en relación con la problemática que se ha vivido en las elecciones anteriores y cómo lo estamos viendo para la siguiente.

La verdad es que todo lo logístico, todo lo procedimental, todo lo documental que se hace en una elección se prepara y se acuerda en el Consejo General con base en la Ley.

Entonces, enfrente tenemos, primero, ver qué viene con la Reforma Electoral en relación con procedimientos, con sistemas, con documentos, con todo eso y,

Segundo. Son pasos que se van viviendo dentro de un Proceso Electoral, cómo sean los documentos, cómo sean los materiales de votación de la elección siguiente tendrá que  dirimirlo el Consejo General en su momento, algunas cosas antes y otras durante el Proceso Electoral una vez que se emita la Reforma.

-Pregunta: Pero estos ejercicios que están haciendo ya, permítame insistir, le darían al IFE la posibilidad, en caso de que así se decidiera de que en las próximas elecciones federales o en las siguientes pudiera ya hacer un ejercicio paralelo a la forma tradicional de votación, si este ensayo podría tener mucho más forma o mucho más seriedad sería, me imagino, la elección un buen terreno para practicar, en efecto, a la mejor en una especie de votación paralela si es que están funcionando correctamente.

A eso me refiero, el IFE, independientemente de las decisiones que se tomen en el Consejo, este desarrollo podría ya tener una forma mucho más seria para las próximas elecciones.

-Mtro. Miguel Ángel Solís: Esa es la idea. Nosotros, con la base de los resultados que obtengamos no en elecciones constitucionales, porque a veces puede preverse un ejercicio paralelo o una elección constitucional en papel por la vía electrónica, se ha hecho en otros ámbitos.

Sin embargo, estos asuntos son muy, deben ser muy cuidados porque están en el ámbito de la contienda política, que complicado asunto siempre, verdad.

Entonces, nosotros hemos pensando, durante 2008, focalizar en públicos selectos por la importancia que tienen en las decisiones para el futuro de la votación electrónica, pero todavía no hemos pensado en hacer votaciones ligadas a las elecciones constitucionales, todavía no.

En su momento, por ejemplo, lo que reflexionen los partidos políticos y lo que reflexionen fundamentalmente los legisladores en las dos Cámaras será o no una base para poderlo hacer más pronto o de manera más apegada a alguna disposición de alto nivel al respecto.

Mientras tanto, para estas otras pruebas piloto con públicos selectos sí confiamos en tener el apoyo del Consejo General para ir permeando en conocimiento y en confianza en la ciudadanía.

-Moderador: César Reyes, por favor.

-Pregunta: Otra vez una duda que me surgió sobre esta modalidad que ustedes estarían proponiendo precisamente.

¿Qué candidatos habría o cómo han pesando ustedes para evitar que personas ajenas a la lista nominal de determinada casilla pudieran votar, es decir, que no haya embarazo, vulgarmente se dice embarazos de urna, o que vote gente que ya ni siquiera viva, no sé, cualquier problema de este tipo?

-Mtro. Miguel Ángel Solís: Muchas gracias, igual que todas las preguntas muy interesantes.

Sí, les he dicho que hemos previsto varias cosas que son problemas en otros países o con otros equipos.

No es lo mismo por ejemplo, votar en un aparato que está en la casilla, que tiene su propio sistema que se cierra, que tiene candados, llaves concretas, objetivas para abrirlos y cerrarlos y que no está enlazada a la Internet, a una línea telefónica al Internet, no, a votar por otros medios más sofisticados que se han experimentado en otros países más avanzados, como la votación telefónica, las palm que decía el licenciado Cervantes, en fin otros medios.

Este sistema está diseñado pensando en que permitiría la votación exclusivamente de una cantidad de personas igual a la lista nominal de esa casilla. Es decir, una boleta electrónica nuestra no sería para cualquier casilla. Ésta que tengo aquí sería para la casilla 24 básica del distrito tal de tal estado y no sería útil en ninguna otra casilla.

Y, entonces, llegando el caso de que votara el cien por ciento de los ciudadanos, éstos serían, por ejemplo, 237 más 10 representantes de partido, 247. Cuando se agote ese cien por ciento la máquina ya no admite ningún voto más.

-Moderador: El licenciado Antonio Cervantes.  |

-Lic. Antonio Cervantes: Gracias.

Simplemente para reiterar una invitación a los representantes, a ustedes, los representantes de los medios, a los ciudadanos, a través de ustedes para que asistan a este Seminario el próximo 21 de noviembre a las nueve y media de la mañana aquí en el Auditorio del IFE.

Comentar también que la boleta electrónica que explicó el profesor Solís estará, se mostrará en una feria de tecnología que estará instalada aquí en la explanada del Instituto, ahí podrá la gente venir y usarla en este prototipo.

Finalmente, tenemos la presencia en una Conferencia Magistral de un pionero en los temas de e-democracia y tecnología, que se llama Steven Clift, él es norteamericano, va a estar aquí; y además de una serie de especialistas que estarán a lo largo del día trabajando estos temas. Ojalá que la convocatoria sea difundida por ustedes.

Gracias.

-Moderador: Juan Carlos, por favor.

-Pregunta: Nada más para complementar otra duda. Es evidente que el país es muy diverso y que no en todos lados la tecnología es igual, ¿cómo garantizar que los equipos, que me imagino en términos ideales, cuando ya la votación electrónica estuviese implementada para elecciones federales en todo el país sería por lo menos un equipo por casilla, eso es lo que yo entiendo, cómo garantizar que haya funcionalidad absoluta y confiable, lo mismo en Monterrey que en la Selva Lacandona?

-Mtro. Miguel A. Solís: Muy bien. Porque hemos pensado en un equipo que sea independiente en energía, que tenga reforzamientos de una o dos baterías que duren por lo menos 14, 16 horas la carga. Y para esto nos ayuda mucho la simplicidad del equipo.

Decía a ustedes que más que ser una computadora, que así son en lo general las urnas electrónicas, será, tiene la imagen y su funcionamiento es tan sencillo como una sumadora.

Entonces, permite que la descarga de corriente de la pila sea muy leve y que tenga una gran duración. Si se prevé una pila complementaria, si se revisa previamente a la entrega al presidente de la casilla en sus cargas y se empaca de forma tal que se proteja la carga, estaremos garantizando que no dependemos de la energía eléctrica de línea.

O sea, podría ser una opción utilizar la energía eléctrica de pared, pero nosotros estamos pensando en que el diseño contempla dos baterías o una batería suficiente para el trabajo sencillo de la máquina.

-Moderador: Si no hubiera preguntas, muchas gracias a todos.

Buenas tardes.

 

 
 
 
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