Coordinación Nacional de Comunicación Social

México D.F. ,a 24 de Agosto de 2015

VERSIÓN ESTENOGRÁFICA DEL MENSAJE DEL CONSEJERO PRESIDENTE DEL INSTITUTO NACIONAL ELECTORAL (INE), LORENZO CÓRDOVA VIANELLO, EN LA FIRMA DEL CONVENIO DE COLABORACIÓN ENTRE EL INE Y LA ASOCIACIÓN NACIONAL DE UNIVERSIDADES E INSTITUCIONES DE EDUCACIÓN SUPERIOR (ANUIES) REALIZADA EN EL LOBBY DEL INSTITUTO

Muy buenos días tengan todos ustedes, maestro Jaime Valls Esponda, Secretario General Ejecutivo de la ANUIES; Doctor Guillermo Hernández Duque, Director General de Vinculación Estratégica de la misma ANUIES; miembros del staff directivo, señores rectores que nos acompañan, señores Consejeros Javier Santiago y Arturo Sánchez; señor Secretario Ejecutivo Edmundo Jacobo, señor Director Ejecutivo de Capacitación Electoral y Educación Cívica, maestro Luis Javier Vaquero.

 

Muy buenos días tengan todas y todos ustedes.

 

La relación con las universidades del otrora Instituto Federal Electoral y del Instituto Nacional Electoral ahora es fundamental, pocos procesos públicos como las elecciones han requerido, requieren, el apoyo, la colaboración de las universidades, lo digo sin medias tintas, la realización de las elecciones en México implica una colaboración permanente, cercana, estrechísima  entre las universidades, y las autoridades electorales, tanto a nivel federal como a nivel local.

 

Las universidades constituyen no solamente espacios que generan contextos de exigencia, sino además ese acompañamiento crítico en los que se materializa la aplicación de la ciencia, la aplicación de la objetividad que implica el desarrollo científico realizado en las universidades en los propios procesos electorales.

 

Solo en este año, en la realización del Proceso Electoral Federal, el Instituto Nacional Electoral contó con una colaboración cercana y vital para el buen cumplimiento de sus atribuciones de la Universidad Nacional Autónoma de México, del Instituto Politécnico Nacional, de la Universidad Autónoma Metropolitana, entre otras muchas instituciones de educación superior públicas y también privadas, hay que decirlo, que han permitido al Instituto cumplir cabalmente sus funciones.

 

De hecho hay muchas atribuciones que requieren de un aval técnico, de un aval científico de las que depende la buena llegada a puerto de las elecciones y que resultan clave para poder inocular ese todavía latente germen de desconfianza que acompaña los Procesos Electorales en nuestro país.

 

El dictamen técnico respecto del código fuente por ejemplo del Programa de Resultados Electorales Preliminares realizado por la UNAM, es solamente un botón de muestra de la centralidad de la participación, de la colaboración de las universidades con el órgano electoral.

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