Número: 083
México D.F. ,a 20 de Marzo de 2015
Este
día concluyó el foro sobre El nuevo
modelo de regulación de encuestas electorales, organizado por el Instituto
Nacional Electoral en coordinación con el Instituto de Investigaciones
Jurídicas de la UNAM, con el apoyo de la Asociación Mexicana de Agencias de
Inteligencia de Mercado y Opinión Pública (AMAI) y el Colegio de Especialistas en
Demoscopía y Encuestas (CEDE).
Los
temas tratados en las cuatro mesas del foro y la conferencia magistral del
especialista de la Universidad de Michigan, Michael Traugott, versaron sobre el
análisis del nuevo modelo de regulación de encuestas, que luego de la reforma
electoral de 2014 y de la aprobación de
los lineamientos del INE para normar la publicación y realización de encuestas,
tuvo cambios sustantivos con efectos para encuestadores, medios de comunicación,
y autoridades electorales locales, principalmente.
De
las ponencias del evento, en que participaron líderes de las casas
encuestadoras más importantes del país y de las asociaciones de las que forman
parte, académicos especialistas de reconocido prestigio, periodistas y
Consejeros Electorales del propio INE, se pueden esgrimir las siguientes
conclusiones generales:
• La nueva normatividad, aun con los cambios sustantivos derivados de la reforma electoral de 2014, mantiene como eje central de la regulación un régimen de transparencia, que se materializa mediante la difusión que hace la autoridad electoral de los estudios científicos que respaldan los resultados de las encuestas sobre preferencias electorales que son publicados por cualquier medio.
• En este sentido, la obligación central que establece la norma es que quienes publican encuestas sobre preferencias electorales deben entregar el estudio metodológico que respalda los resultados publicados, los cuales deben apegarse a los criterios generales de carácter científico aprobados por el INE. Es decir, la regulación se enfoca en quienes publican encuestas, y por otro lado en quienes las realizan.
• La gran novedad del nuevo modelo consiste en la nacionalización de la normatividad en la materia, es decir, que se homologan los criterios para la realización y publicación de encuestas en todo el territorio nacional y para encuestas de cualquier elección (ya sea local o federal). Esto resulta significativo si se considera que antes de la reforma, cada entidad tenía su propia normatividad en la materia, resultando muy disímiles entre ellas e incluso contradictorias.
• Otro cambio significativo del nuevo modelo discutido en el foro es el relacionado con la obligación de entregar a la autoridad, además del estudio científico que respalda resultados publicados, también el costo y patrocinador de la encuesta. Ahora podemos saber, no sólo quién realiza, solicita y publica las encuestas, sino también quién las paga y cuánto paga por ellas.
• Las encuestas tienen una creciente importancia en los procesos electorales. La información que ofrecen contribuye en la construcción de un voto informado, aunque su influencia tiene un efecto múltiple en la formación de preferencias; la opinión general durante el foro apunta a que el posicionamiento de un candidato o partido en las encuestas no se traduce automáticamente en más votos.
• Más aún, hubo coincidencia en que la importancia de las encuestas no sólo radica en la influencia que ejercen sobre los votantes, sino que de manera muy significativa, el desarrollo mismo de las campañas electorales está definido por las encuestas electorales que son usadas por los partidos como parámetros para sus estrategias de promoción política, e incluso de litigio electoral.
• En este sentido, el reto común de autoridades y el propio gremio parece ser inequívoco: impedir que las encuestas electorales sean usadas como propaganda electoral; es decir, diferenciar la actividad demoscópica de la propagandística, la ciencia de la opinión frente a la publicidad.
• En todas las mesas del foro, un tema que fue abordado de manera trasversal fue el del rol que tiene los medios de comunicación para publicar resultados de encuestas electorales. Hubo coincidencia en la necesidad de establecer códigos de ética periodística y en la importancia de llevar a cabo un trabajo conjunto de pedagogía pública para entender qué mide una encuesta, cómo debe presentarse, para qué le sirve a la sociedad, etc.
• Un reto consustancial para la regulación en materia de encuestas y el establecimiento de un contexto de exigencia, es la participación que deben tener distintos actores (observadores electorales, organizaciones civiles, analistas, académicos, especialistas en la materia, periodistas, etc.) para analizar, dilucidar, y ofrecer explicaciones sobre el desempeño de las encuestas y los resultados que ofrecen y cómo se publican.
• Por otra parte, el foro abordó el tema de las encuestas y los medios emergentes como un reto para la regulación, pero sobre todo implica un desafío para el compromiso del gremio de las encuestas para distinguirse de la multitudinaria publicación de resultados de preferencias electorales que no tienen base científica alguna, que no son verdaderas encuestas. En este sentido, se hizo énfasis en el compromiso del gremio con la creación de un piso mínimo de confianza, con el fin común de “atajar la charlatanería.”
• En la discusión del foro estuvo presente la idea de que la normatividad en materia de regulación de encuestas, que no prevé sanciones específicas en la materia, está inspirada y aspira a un esquema de autorregulación del gremio, para ofrecer información que contribuya al voto razonado y permita poner en marcha la sanción pública por desprestigio.
• Finalmente, quedó patente que si bien
en primera instancia los lineamientos de la autoridad electoral buscan
reglamentar la difusión de encuestas electorales, lo que se petende a fin de
cuentas es proteger y garantizar el derecho de los ciudadanos a contar con
información lo más certera, fidedigna y legitima posible, que le sirva para
normar su criterio y tomar su decisión ante las urnas.
El
foro que tuvo lugar en el Auditorio Héctor Fix-Zamudio del Instituto de
Investigaciones Jurídicas de la UNAM, se encuadra las actividades que el
Instituto Nacional Electoral para propiciar espacios de diálogo, discusión y
debate sobre el tema de las encuestas electorales, tan relevantes en las
contiendas de la actualidad.